Hoy estábamos en la Peluquería y mi hija pequeña de 18 meses estaba jugando tranquilamete y la cogí en brazos de pronto me di cuenta que tenía algo en la boca... y le saqué un trozo de cristal de un afilado increíble... se me puso los pelos de punta... cuando me tranquilicé vi el buen trabajo del Ángel de la Guarda... yo me imagino que cada vez que salimos la familia entera a la calle se pone toda la corte celestial en peso a seguirnos para ver en qué lío nos metemos.... Es más creo que el Ángel de la Guarda de mi hija pequeña es una especie de 007 James Boon... angelical claro, pero preparado para la acción.
Desde aquí le doy mil gracias...
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